Las TORTITAS DE PATATA CON JAMÓN Y BACALAO o, si prefieres, CROQUETAS DE PATATA, son fáciles de preparar. Eso sí, se necesita un poco de tiempo y un mucho de paciencia. Paso a paso y con maña podemos tener unas tortitas que nos van a servir de tapa original, de entrada divina, de cena genial o de merienda para todos. ¿Por qué? Pues porque a la patata, que es el ingrediente básico, le va bien todo. Es decir, prepararnos la tortita con una base de patata y un huevo y añadimos lo que más nos guste (a nosotros o a nuestros invitados) y tenemos el éxito asegurado.
Misma base para dos tipos de tortitas: con JAMÓN o con BACALAO
La primera vez, yo preparé dos clases de tortitas de patata: con jamón y con bacalao, y esta es la receta que aquí os presento. Sin duda, prefiero las tortitas de bacalao, pero no cuesta mucho preparar otras con jamón por si hay alguien a quien no le gusta el pescado.
La segunda vez repetí las de bacalao e hice una prueba: tortitas de queso azul. Buenísimas, pienso seguir probando sabores diferentes: tortitas de champiñones, de sobrasada, de verduras… Como he dicho antes, la patata es un ingrediente que puedes mezclar con muchos otros. La cuestión es ir probando.
El bacalao es un pescado fácil de usar, además de sano y sabroso
Ya sabes que suelo tener siempre en mi cocina bacalao; además de que me encanta su sabor, es un pescado práctico. Lo compras salado y lo puedes usar cuando quieras; en más de una ocasión me ha sacado de un apuro. Preparo varias recetas con este pescado, aunque sin duda alguna mi favorita es BACALAO CON FRITADA ( y me da igual si dicen que engorda o no, yo lo como frecuentemente y mantengo una línea envidiable; de verdad).
¿Por qué comer bacalao?
Recuerda que el bacalao es un pescado blanco muy nutritivo. Contiene algunos componentes necesarios para el cuerpo humano que son difíciles de encontrar en otros alimentos. Es buena idea introducirlo en tu dieta, al menos una vez a la semana. Por ejemplo, tiene:
- Selenio (previene la oxidación celular)
- Vitamina D (regula el paso del calcio a los huesos)
- Ácido graso omega 3 (protege el sistema cardiovascular)
Cuidado con la sal
Añado que las virtudes nutritivas del bacalao son muchas y que todos deberíamos comerlo de vez en cuando; eso sí, con precaución, por el exceso de sal que lleva y que, aunque desalemos bien, siempre suele mantener en parte. Por eso, cuidado con la sal en esta tortitas de patata con bacalao, ¡mejor no pongas!
Más ideas
- Si les das forma redonda, en vez de tortitas tendrás unas estupendas croquetas. Del tamaño que tú quieras.
- Puedes insertar dos o tres en un pincho largo y combinar con alguna verdura (un tomatito, un trozo de pimiento verde o rojo); te quedará muy bonito y original.
- Pon aparte, en unos cuencos pequeños, varios tipos de salsas para que los comensales puedan elegir si quieren «mojar» las tortitas de patata con jamón o bacalao.
- Como he dicho antes, ve probando con diferentes ingredientes hasta obtener las tortitas de patata que más te gusten.
OTRAS TAPAS/APERITIVOS
TORTITAS DE PATATA CON JAMÓN Y BACALAO
- Cuatro patatas medianas
- Tres o cuatro lonchas de jamón (serrano o york)
- Dos huevo
- ¼ de cebolla
- Un puñadito de queso rallado
- Unas migas de bacalao desalado (unos 100 gramos)
- Un ajo
- Un poco de perejil
- Pan rallado para rebozar
- Aceite de oliva
- Pela las patatas.
- Ponlas a hervir en una cazuela, más o menos 30 minutos.
- Después, quita el agua y machácalas con un tenedor (como si hicieras un puré).
- Añade un huevo y mezcla bien.
- Ya tienes la masa base.
- Ahora, pon la mitad de esta masa en un cuenco.
- Vas a hacer dos tipos de tortitas.
- A una mitad añadirás el jamón, el queso y la cebolla (los ingredientes los has troceado previamente). Mezcla bien todo.
- A la otra mitad añade las migas de bacalao (recuerda que tienes que haberlas desalado antes, es decir, la noche anterior las pones a remojo y le cambias el agua un par de veces; ya está), el perjil y el ajo picaditos. Mezcla bien.
- Espera que la masa se enfríe un poco.
- Ahora es el momento del rebozado.
- Prepara dos platos: unos con un huevo batido y otro con el pan rallado.
- Pon una sartén con dos dedos de aceite y déjalo calentar.
- Ahora, coge con una cuchara una porción de masa (como un huevo, más o menos, eso depende de tu gusto) y, con las manos, dale la forma de la tortita. Pasa primero por el huevo y después, con cuidado, por el pan rollado, intentando que se quede totalmente rebozada.
- Cuando el aceite esté caliente, fríe las tortitas. Que queden doraditas y crujientes.
- Ponlas en una fuente.
- Las de bacalao las puedes acompañar de una mahonesa o un alioli suave.
- Las de jamón de una mostaza o de una salsa barbacoa, por ejemplo.
- Pero con las salsas, mandas tú que conoces a tus comensales y sabes lo que prefieren.
- ¡A disfrutar de una buena comida casera y sana!
