Esta PASTA CON ESPÁRRAGOS VERDES Y GUINDILLA es una receta sencilla que combina perfectamente el sabor de varias verduras, entre las que destacan los espárragos verdes.
HAY QUE COMER PASTA
La pasta es ideal todo el año y no debe faltar en nuestro menú (al menos una vez por semana).
Realmente con la pasta se potencia la imaginación en la cocina. ¿Por qué? Pues porque se puede hacer con todo: verduras, carne, pescado. Y sin nada, con un simple pesto, aceite especial o una salsa también está deliciosa.
En España se ha consolidado y se ha adaptado perfectamente a nuestros ingredientes y a nuestra forma de cocinar. Yo suelo usar los espárragos verdes en mi cocina, sobre todo en temporada, porque su precio baja mucho; me encantan (de cualquier manera) y estoy muy contenta con el sabor de aportan a esta receta de pasta.
MÁS IDEAS
- La guindilla se puede eliminar.
- También el curry se puede quitar y puedes probar con otras especias: orégano, nuez moscada…
- Las verduras también son libres: pimiento rojo, berenjena, champiñón… Yo siempre recomiendo usar las “de temporada”; suelen estar más sabrosas y además, son más baratas.
- Se puede servir un poco de queso rallado en la mesa, para que cada uno decida si quiere o no.
Prueba esta receta y, a partir de aquí, crea la tuya propia.
PASTA CON ESPÁRRAGOS VERDES Y GUINDILLA
- Para cuatro comensales
- La pasta que prefieras
- 12 espárragos verdes
- Dos tomates maduros medianos
- Medio calabacín
- Medio pimiento verde
- Cuatro ajos
- Dos guindillas (si te gustan)
- Aceite de oliva
- Una cucharadita de curry
- Una pizca de pimienta (recién molida)
- Sal
- Pon una olla con agua para calentar y prepara la pasta como lo haces habitualmente.
- Lava la verdura.
- Corta los espárragos por la mitad. Reserva las puntas para freír más tarde y decorar el plato. Corta el resto de espárragos a cuadraditos.
- También corta el calabacín, el pimiento, los ajos y el tomate.
- En una sartén honda (tipo wok; si no tienes, no pasa nada, usa una cazuela), echa medio dedo de aceite de oliva y fríe las verduras (en orden de “dureza”: primero echa los espárragos, saltea y añade el pimiento y el calabacín; saltea y ahora los ajos y el tomate. Todo a fuego medio para que se vaya pochando). Añade el curry y la pimienta.
- Cuando esté casi cocinada la verdura, haz las puntas de espárragos “a la plancha” en otra sartén. Échales un poco de sal maldom o sal gorda.
- Mientras, corta las guindillas y resérvalas.
- Monta el plato: pon la pasta, haz un hueco en el centro y echa la verdura; al final, remata con las puntas de espárragos y unos trocitos de guindilla.